Todo escalador experimenta tarde o temprano el desgaste de las suelas en sus pies de gato. Es un proceso de deterioro normal para este tipo de material, siendo el resolado (cambio de suela) a tiempo del pie de gato, la forma en que los escaladores podemos ahorrar dinero aumentando la vida util de este producto.

Los pies de gato en la escalada, son quizá, una de las partes más importantes dentro de nuestro equipo de escalada. Al igual que las manos, estos nos mantienen adheridos a la roca, aportándonos esa seguridad de adherencia tan necesaria para ascender por complejos tramos de placa tumbada, desplome, placa desplomada, etc.

La adherencia de estos, estará marcada por la capacidad y propiedades técnicas que las gomas o suelas que estos usan tengan para ser capaces de mantener un alto grip (agarre). Muy condicionado por la dureza de las gomas y la forma de la puntera de nuestros gatos. Particularmente, la dureza determinará el rendimiento en cuanto a durabilidad vs agarre, mientras que la forma de la puntera nos aportará mayor o menor superficie de presión con la que aumentar el área de contacto.

Tipo 3. Suelas extraídas artesanalmente de una plancha de goma Vibram

Todas estas características serán esenciales tenerlas en cuenta a la hora de comprarlos, sin embargo, una vez ya los tenemos y, hemos gastado sus primeras suelas, tendremos que considerar el resolado. Una palabra creada para definir un proceso consistente en el cambio, sustitución o reparación de suelas viejas o gastadas por unas nuevas.

Es de vital importancia acudir a empresas profesionales y asentadas en el mercado que nos aporten experiencia y rigurosidad en la sustitución de las suelas para evitar alterar las características técnicas de los gatos. Desde EscaladaGranada, recomendamos dentro de la numerosa oferta existente, Re-Rubber. Una empresa avalada por su profesionalidad y destreza en este ámbito del resolado, además de llevar a cabo la experimentación de su producto sobre el terreno, ya que esponsoriza a numerosos escaladores muy experimentado que le ayudan a depurar y mejorar todo el proceso.

Resolado de un pie de gato. Es un proceso artesanal en el que se efectúa la sustitución de suelas viejas o gastadas por nuevas gomas que aumentan la vida util de nuestros gatos.

Como podemos ver en el video, el resolado de un pie de gato consta, a gran escala, de tres fases principales que determinarán el resultado final. Es de suma importancia que todas y cada una de estas fases tenga en cuenta en todo momento la ergonomía con la que el gato fue construido, pues modificar esta, conlleva alterar elementos que el usuario podrá percibir como incomodidad o falta de precisión en la puntera, así como, la imposibilidad por del resolador de recuperar el gato con calidad una vez ya se ha dañado con anterioridad sus hormas, tecnologías, entresuelas, etc.

Debido a esto, aconsejamos encarecidamente preguntar sobre estos pasos del proceso antes de depositar nuestra confianza en servicios de resolado no oficiales, esto te ayudará a conservar tus pies de gato en condiciones óptimas por más tiempo, lo que conlleva un ahorro de dinero en material que podremos emplear para otros usos.

Parte del material empleado para el resolado de un pie de gato de escalada. Hormas y suelas

Fases en el Proceso de Resolado de un Pie de Gato

1. Retirada de las suelas gastadas:  Hay dos maneras de quitar suelas, la mas extendida entre los resoladores seria lijándola, sobre todo para gatos en los que se cambia media suela o, con calor despegándola, mas aplicable al cambio de la suela completa.

Ambas son igual de delicadas (ya que si te excedes lijando no hay vuelta atrás), de igual forma que si el despegado con calor se efectúa de manera errónea para suelas completas, sin la horma específica  del gato, cambiaremos totalmente su diseño al poner la suela nueva. Igualmente, si abusamos del calor,  podemos despegar el gato entero, lo que conllevaría una reconstrucción total que seguro no queremos. Por contra, si no conseguimos la suficiente temperatura para el despegado de las gomas, arrancaremos, literalmente, partes necesarias que en el peor de los casos dejarán el gato inservible.

Pies de gato con la suela gastada ya retirada listos para continuar el proceso

2. Elección de las nuevas suelas: La elección de suela es bastante personal, quedando siempre un mejor acabado y funcionamiento del gato en suelas completas antes que en medias suelas, ya que se podrá transferir mejor la fuerza ejercida hacia la parte delantera del pie de gato, repartiendo toda la tensión por esta  y, así evitamos cortes que puedan ocasionar perdidas de tracción.

La suela dependerá del tipo de escalada que queramos realizar, del gato y del peso del escalador. Un escalador más pesado conseguirá deformar antes una suela dura que uno mas ligero. Siendo por tanto una decisión más certera para un mejor rendimiento la suela dura antes que la más liviana.

Tendremos en cuentas las gomas más duras para pies pequeños o plaqueros y las blandas para adherencias o desplomes.

Actualmente el mercado esta repleto de diseños de pies de gatos, sin embargo muchos de estos han sido fabricados para determinadas suelas, pudiendo mermar su rendimiento si cambiamos el tipo de esta. Como ya venimos diciendo, en todo esto influye la decisión del escalador, posibilidad de conseguir las suelas deseadas y la capacidad para efectuar un ajuste óptimo de estas al gato.

Hormas empleadas para la sustitución de las suelas en el resolado de un pie de gato.

3. Pegado de suelas: Todas las partes del resolado son importantes: retirada de la suela, elección de puntera, la forma de recortar la suela, el pegado y el acabado final. Sin embargo, la más delicada de todas estas y que más problemas conlleva es el pegado o,mejor dicho, el pegamento empleado.

El pegamento es lo que hace que la suela no se despegue de nuestro pie de gato, lo que puede acarrear malestar e inseguridad escalando. Suele emplearse cola de contacto mezclada a un tanto por ciento con catalizador para aumentar su fuerza. Un mezcla que permite cuando la suela y el gato entran en contacto, que ambos se adhieran a la perfección. Es de vital importancia en esta fase usar una buena cola y catalizador, esparcirlo en una superficie fina y uniforme, dejarle el tiempo necesario de secado y un calentamiento justo para su final pegado. 

Destacar que el pegamento actúa por calor, por tanto, si usamos nuestros gatos en meses caluroso debemos evitar exponerlos al sol, evitaremos de este modo que el pegamento reaccione y puedan despegarse alguna de sus partes.

Dentro del taller de Re-Rubber, Ignacio o “Ñaco” para los amigos efectuando el pegado de pies de gato

Como conclusión a este artículo dejaremos una serie de consejos para el mantenimiento de nuestros pies de gato:

• Recauchutar el gato cuando aún queda algo de suela para evitar que se deforme el gato o se deban poner punteras.

• No introducir los gatos en lavadora. Algunas de sus partes pueden verse afectadas, como es la piel o las entresuelas (cartón) que estos usan.

• No andar con los gatos, pues el pie desplazará este hacia la parte externa lo que puede llevar a deformar la horma.

• Si te suda el pie, puedes optar por bactericidas o desodorantes que aplicaremos antes de su uso. Así mismo, podemos usar papeles en su interior que absorban la humedad, evitando el exceso que pueda alterar la forma del gato.

• Comprar la talla adecuada. Un gato demasiado pequeño puede lesionarnos y hacer que nuestra escalada sea muy dolorosa. Un gato grande nos dificultará ser técnicos en vías de dificultad.

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